S. O. S.
Pensar en la naturaleza humana es algo complicado e indescriptible, así
como tan sencillo parece, porque es el ser humano, de la especie animal la
parte superior de todos los demás, sin embargo es contradictorio, pero muy
real, es de la especie animal el que más estragos puede causar. Es el ser vivo de la especie animal el que
tiene la capacidad de pensar, amar, discernir, escudriñar entre otras
cualidades únicas de este ser, pero le ha servido esto para hallar la paz?,
para ir siempre en pos del bien?, para amar de forma tal que sólo piense en el
bien que es capaz de proporcionar?, tal parece hasta ahora no ha sido así. La pregunta sería pues: ¿qué impide al ser
humano, saber que actúa mal y no lograr cambiar, aunque diga querer hacerlo,
aunque diga que se arrepiente?, situación complicada pues, el ser humano como
dicen las sagradas escrituras, nace con el “pecado original”, nace con una
conciencia del bien y del mal, pero a través del tiempo y las circunstancias va
estableciendo paradigmas del bien y del mal, según los eventos que va viviendo
en el día a día, de tal forma, que lo que para algunos es incorrecto, hay otros
que lo dan como bueno y válido y aunque hayan esperanzas y anhelos comunes a la
humanidad, como la paz, libertad y el amor por ejemplo, no es menos cierto que
el mundo se va fraccionando según sus esperanzas particulares y sueños
personales. Los extremos son tan
amplios y las situaciones llegan a tales extremos que han tenido que crear
leyes donde existen condenas de muerte y cadena perpetua según las infracciones
que se cometan; entonces la situación de paz es muy controversial y complicada.
Pero a todo lo expuesto anteriormente, deberíamos añadir la intríngulis
del ser humano que nace ya con problemas donde pensar en el amor y la paz queda
vedado, porque ya es un ser con deficiencias y discapacidades mentales, donde
son muchos más posiblemente los pasan por sanos y normales y no lo son, donde
sólo lo percibimos ya después que ejecutan alguna acción fuera de lo normal que
sorprenda o destruya, a la mayoría y es
en ese momento cuando percibimos que teníamos un ser discapacitado mental a
nuestro lado, esos seres con esas deficiencias jamás estarán en condiciones de
percibir que están actuando mal en la mar de las ocasiones, productos de sus
propias limitaciones. Y peor es cuando
uno de estos casos de discapacidad mental oculta, llega a ocupar algún puesto
en el ámbito social donde debe tomar difíciles y grandes decisiones que afectan
al conglomerado social, un ejemplo de esto fue el caso de Nerón, cuando mandó a
quemar la ciudad, sólo para verla arder en llamas, esto por mencionar un caso,
porque en la historia fungen muchos más casos así y aunque la formación que
reciba el ser humano atenúa un problema así, si lo hubiere, en cualquier
momento existe la posibilidad de que pueda aflorar tal o cual forma de actuar
en detrimento de la mayoría.
Entonces nos preguntamos, cómo podríamos cambiar la forma de actuar del
ser humano, partiendo de los aspectos normales de un ser vivo, dónde está la
verdad del bien y del mal?, se podría evitar caer en manos de personas
discapacitadas mentales o todo ser que ejecuta dañar a otros ya pasó lo que es
lo normal o anormal del ser humano? La formación
puede más que la razón o la formación es variada por circunstancias difíciles
que embaten al ser humano?, es posible que todo esto sea difícil de responder,
porque como dice un dicho cada cabeza es un mundo y las reacciones del ser
humano son impredecibles normales o no, el ser vivo es una caja de preguntas y
respuestas al azar, que moldeadas por una serie de circunstancias donde las
posibles respuestas, sólo la saben el momento en que se ejecutan, aunque existe
la lógica y el sentido común, no siempre estas funcionan y es por ello que nos
quedamos en ocasiones esperando una respuesta, cuando al final se nos da, otra.
Viendo todos estos por menores, podemos palpar que es difícil lograr,
que siempre haya paz y amor en nuestra humanidad, aun siendo estos dos
elementos anhelados por todos los seres humanos, no es tan sencillo que los
seres humanos arriben a acuerdos de bien común ya que todos respondemos con
posiciones, circunstancias, experiencias, intereses y paradigmas variados, para
todo esto tenemos que convencernos a nosotros mismos que debemos ceder, ceder
en un mundo en el que sólo estamos de paso, que no somos perennes y que nada,
absolutamente nada de lo que poseemos nos lo llevaremos a ningún lugar, después
de haber partido de este mundo llamado planeta Tierra; tenemos que haber tenido
una formación e ideales muy humanos con altura de respeto, educación y amor que
no suelen abundar a veces ni en los monasterios, además, de mucha inteligencia
para razonar en pos del bien y aceptar como bueno y válido la paz social; no
podemos ser seres resentidos, rencorosos, egoístas, llenos de envidia, ira, soberbia
y orgullo como para bajar nuestros niveles de exigencias en pos de una mejor
humanidad y desde estos ángulos deberíamos preguntarnos: ¿estamos preparando
seres humanos con estas posibilidades?, bombardeamos a diario estos valores de
amor, solidaridad y respeto entre otros, en nuestros niños y jóvenes?, si no es así,
qué futuro queremos esperar? Lo que no sembramos, no cosecharemos, eso hay que
tenerlo claro y con tanto cuidado de estar ahí para que cuando venga la
tormenta no, nos tire lo que ya habíamos sembrado, labor ardua, rutinaria,
perseverante, fuerte, pero necesaria; sin dejarnos vencer del cansancio, para
ver si podríamos al menos mejorar un poco nuestras condiciones de violencia,
guerras e injusticias, toda esta dedicación no será nada, nada fácil, pero es sumamente
necesaria de urgencia ¡!.-